Cambiando el rumbo

Este fin de semana ha sido extraño, lo que yo suponía iba a ser un gran fin de semana con unos amigos a los que hacia tiempo no veía, de repente se ha convertido en el fin de semana que te abre los ojos para darte cuenta que quienes tu creías tus amigos igual tan solo son conocidos. Y que lo para ti querías que fuesen un montón de horas a su lado, para ellos con quedar un ratito era suficiente, para el resto no entrabas en sus planes.

Fue una sensación extraña sentirte de repente fuera del circulo, pero después de días jodida y pensando que he hecho yo mal, recapacitas y repasas un montón de momentos, y te das cuenta que realmente nunca estuviste dentro y que seguramente estabas ahí un poco por casualidad. Y que simplemente ahora es cuando me he dado cuenta de la realidad.

No han sido días fáciles, nunca es fácil darte cuenta que estas mas sola de lo que creías. Han sido días de repasar cosas, de repasar actitudes de todo el mundo, de hacerte muchas preguntas y obtener muy pocas respuestas, y por supuesto de alguna lágrima.

No es fácil sentirte sola, y mucho menos para alguien como yo que soy un animal de compañía. Supongo que todo esto me esta sirviendo para darme cuenta que soy todavía mas frágil de lo que pensaba, ya que me he roto en mil pedazos, pero también para darme cuenta que debo ser mas fuerte y no hundirme por estas cosas.

Se que ahora me encerrare un poquito más dentro de mi, si eso es posible,. Pero también se que saldré más reforzada y teniendo más claro quienes han estado siempre ahí, y quienes se merecen mis esfuerzos.

La soledad de la maternidad

Nunca pensé que al ser madre junto con todas las alegrías que me traería mi pequeño también vendría una extraña soledad.
Parece que de repente he desaparecido para casi todo el mundo que estaba en mi vida. Ya nadie piensa en mi para tomarse un café y hablar un rato.
Sabia que tener a mi pequeño supondría un pequeño distanciamiento de algunas personas, simplemente porque ahora nuestra ritmos serian distintos, pero nunca imagine que muchas personas importantes en mi vida desaparecerían del todo prácticamente, cuando pensaba que estarían a mi lado para vivir estos momentos de felicidad junto a ellos.
He de reconocer que seguramente gran parte de culpa la tengo yo, que en los primeros meses de maternidad estaba totalmente desbordada y desaparecí porque simplemente no daba abasto con mi peque, la lactancia y demás.
Espero que al final con el tiempo algunas de esas personas vuelvan a mi vida, y si no lo hacen es que simplemente no tenían que estar ahí .

Pero lo más importante sigue siendo mi pequeño, sus sonrisas y sus avances.